Los ángeles son seres de luz que habitan en un universo divino, son creaciones de la divinidad que nos rodean para guiar nuestra vida, apoyarnos en nuestras decisiones y procesos, acompañar desde el bienestar y el amor. Su energía es poderosa, y a la vez, calmada y amorosa, es una energía que nos mueve y nos ayuda a mantener una conexión con nuestro corazón y con el universo.
La misión de los ángeles es estar a nuestro servicio, ayudarnos permanentemente, la única condición para que esto suceda es que pidamos esa ayuda, ya que aunque deseen hacerlo, necesitan nuestro permiso explicito para intervenir. Como seres humanos tenemos libertad de albedrío y ellos respetan esta libertad por encima de todas las cosas; somos responsables de nuestra existencia, creamos nuestras experiencias y lo comprendamos o no, todo en nuestra vida es una manifestación de nuestros deseos. Por esta razón los ángeles se mantienen al margen hasta que seamos nosotros mismos quienes les pidamos guía e intervención.
Otro aspecto importante de esta intervención es que estará alineada siempre con aquello que traiga mayor bienestar a nuestra vida y esté conectado coherentemente con el propósito de nuestra alma. Quiere decir que aquellos pedidos que nos saquen de nuestro camino seguramente serán realineados, y se nos mostraran con amor y respeto desde un ángulo diferente al que planteamos inicialmente. A veces hablamos desde la mente y el falso ego, así que ellos nos ayudan a regresar al corazón, al plan original del alma para esta existencia.
No hay nada demasiado grande o demasiado pequeño para estos seres, todo es posible y siempre podremos recibir su ayuda.
Invítalos a participar activamente en tus creaciones y abre tu corazón a recibir sin condiciones.
!Ellos te esperan con amor!
¿que esperas?